La Mesa de Zona de la Zona Este-1 se reunió ayer en el Centro Cívico Delicias, abierto para la ocasión, con el fin de seleccionar las propuestas que las vecinas y vecinos de la zona han hecho entre el día 19 de junio y el 1 de julio, y que los técnicos municipales tendrán que valorar…

¿Hay alguien ahí? ¿Alguien entiende de qué estamos hablando?

Para explicaciones más extensas, os enviamos al portal del Ayuntamiento de Valladolid donde tienen publicado Los Presupuestos Participativos. Aquí solo vamos a comentar algunas impresiones acerca de la reunión propiamente dicha.

Cosas positivas

• Todos los integrantes de la mesa de Zona han asistido.

• Se ha tratado de que se eligieran propuestas de todos los barrios de la zona.

• Ha habido respeto entre las participantes.

• Todes pudieron hablar.

• Se han cumplido las expectativas de la organización sobre el número máximo de propuestas seleccionadas.

• Se han sobrepasado las expectativas de la organización sobre el número de propuestas presentadas por la ciudadanía.

Cosas negativas

• Al margen de la elección de la Mesa, que a nuestro juicio carece de sentido por no haber ni método de elección, ni un número significativo de vecinas o vecinos el día de la reunión, echamos en falta la presencia de Asociaciones Vecinales, de vecines de otros barrios de las zonas y de minorías.

• A nuestro juicio, incorrecta metodología de selección de propuestas:
  • Primero, división en parejas, en las que se puntuaban veinte propuestas por pareja (de media), según unos criterios impuestos por la organización (se puede entender; no tanto la pésima explicación de los mismos). El problema añadido era que todas las propuestas a valorar trataban de temas o ámbitos similares; si en la pareja se tenía una sensibilidad especial sobre ese tema o ámbito, las valoraciones quedaban sesgadas a favor o en contra.
  • Segundo, se cuelgan las propuestas valoradas en una pizarra para la vista de todes, sin aclarar que no se van a leer todas las propuestas entre todes, como se había dado a entender ante una pregunta explícita, y con poco tiempo para analizarlas con cuidado. Varies no se levantan a verlo.
  • Tercero, quedan seleccionadas las propuestas más votadas (por las parejas, según su propio modo de entender los criterios) con ocho, siete y seis puntos.
  • Se dio el caso de que en una pareja a uno de los miembros le tocó valorar sus propias propuestas, y las valoró todas altas. Sesgo no corregido por la metodología empleada.
  • Esto casi tres horas, sin descanso ni tomar nada.
  • A propuesta de un miembro de la mesa, se pidió leer los descartados, y se leyeron los de cinco puntos. Ante la insistencia de ese miembro, se buscó una propuesta (luz en el Parque de Canterac) y se reevaluó entre todes, quedando con una puntuación que lo convertía en elegible.
  • Ante esto, hubo una propuesta de leer todas las que se habían descartado… ¡Más trabajo! Al parecer la mayoría de les miembros de la mesa estaban muy cansados para saber lo que los demás habían propuesto y descartado, y como ya el número de veinticinco estaba alcanzado, la organización habló verbalmente una vez y no verbalmente mucho tiempo y luego decidió que era hora de recoger, pues pa ser la primera vez.
  • Ante algunas propuestas que en parejas no se valoraron, se negaron a valorarlas también en común.
  • Agria discusión sobre el tema, que se zanjó acusando de falta de democracia a quienes defendíamos que debían leerse todas las propuestas de los vecinos y vecinas entre todas las personas de la Mesa. (¡Con la consecuencia de que algunas personas han aceptado que la Mesa descarte propuestas sin siquiera conocerlas! En otras palabras, se han descartado unas cien propuestas sin ni siquiera ser conocidas por todes, situación propiciada y alentada por el diseño metodológico. ¿Esto es más democrático?).
  • Pa ser la primera vez.
• Falta de organización de la reunión:
  • No había conexión a Internet en el Centro Cívico, y si no hubiera sido por la insistencia en que algunas propuestas que llevaban un enlace se miraran en los móviles y se explicaran por el autor (que estaba en la Mesa), ni siquiera se hubieran valorado.
  • Desde el Ayuntamiento no se sabía si varios edificios y terrenos eran municipales o privados tras la criba previa o siquiera si pertenecía a la Zona (se solucionó en el momento con llamadas).
  • No se llevaron a la reunión los documentos (fotografías) que algunas propuestas llevaban adjuntas al ser introducidas en la urna.
  • Se nota que lo que buscan es tener unas propuestas mínimas sin reflexión comunitaria.
  • Se ha querido hacer en un día y se ha hecho; aunque al principio, ante una pregunta de si podía utilizar más tiempo, dijeron que no se descartaba otro día. Al final, han evadido su responsabilidad diciendo que si queremos otra reunión, podemos proponerla nosotres y es vinculante, punto que otra persona de la organización negó. ¿Podemos volver a valorar todo sin la organización ni el Ayuntamiento y sería vinculante? Permítannos reírnos ante la gracia.
  • Aunque colgadas las propuestas en Internet, hubo gente de la propia Mesa que no pudo entrar a verlas (problema genérico de los certificados de la administración).
  • No se mandaron previamente a los miembros de la Mesa de Zona las propuestas documentadas de la Zona para trabajarlas con tiempo ni una explicación de los criterios (colgados en la misma página a la que no se podía entrar).
  • Pa ser la primera vez.
• No existió una formación previa de las personas de la Mesa de Zona, con lo que mucha gente estaba perdida.
• Solo menos de la mitad de las personas de la Mesa habían mirado previamente todas las propuestas en Internet.
• Total, pa ser la primera vez.

En resumen

Ni por parte del Ayuntamiento, ni de la empresa organizadora, ni del vecindario, ni de varios miembros de la Mesa de Zona, con responsabilidades proporcionales decrecientes, se ha dado la talla en esta ficción de Presupuestos Participativos.

El Ayuntamiento quiere colgarse la medalla, la empresa cumplir con sus mínimos metodológicos, el vecindario ni se ha enterado ni se le esperaba, y al parecer es trabajo excesivo la lectura de unos pocos folios.

Total, pa ser la primera vez.

Pues todes contentes.