Esta mañana hemos llegado a cuentagotas, entre citas médicas y de papeles, pero hemos llegado a tiempo. A primera hora, como de costumbre, hemos repasado algo de gramática de manera informal, hablando de lo que hicimos ayer, e introduciendo ya contexto con el imperfecto, que hemos repasado oralmente.
Trabajamos en gran grupo estas primeras conversaciones corales, algunas de cuyas respuestas repetíamos de manera individual para ir consolidando. Luego hicimos tres grupos de conversación, en los cuales hablamos de lo que hicimos ayer, dándole contexto. Explicamos, por ejemplo, que con los verbos de movimiento (ir, venir, quedarse…), ese contexto se hace en indefinido, no en imperfecto.
«Ayer no vine a clase porque fui al médico», y no «Ayer no vine a clase porque iba al médico». «Ayer no vine a clase porque me quedé en casa estudiando», y no «Ayer no vine a clase porque me quedaba en casa estudiando».
Con estos y otros aprendizajes pudieron construir relatos en pasado.
A las 11:30, tras escribir y copiar un texto entre todos, salimos rápidamente para el Centro Cívico Delicias. Y lo hicimos con esa urgencia por dos razones: la primera, que habíamos quedado para hacer un taller de papiroflexia con Paco, de la AFD; la segunda, porque tenía que entregar los premios del I Concurso de Relatos «Delicias, barrio con futuro», y no solo los tenía que entregar, sino que además una de las personas galardonadas es una de nuestras voluntarias de conversación, que ganó el primer premio infantil.
Así pues, hemos podido hacerlo todo: entregar premios, recoger premios, felicitar a las personas premiadas… ¡e incluso hacer un ave en papel que movía las alas!
Por si fuera poco, al final tuvimos un cuarto de hora para repartir tareas para la fiesta de mitad de campamento que celebramos mañana.
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